sábado, 30 de agosto de 2008

¿Cómo se decide el cliente por un servicio o producto?


El triángulo eficiente (calidad, costo y tempo), marca la pauta de una empresa. Existe una permanente lucha de mercados por ofrecer productos y servicios de la mejor calidad, al menor costo y en el menor tiempo posible al cliente, pero, ¿a qué se aferra un cliente a la hora de elegir un alternativa de negocio en una vitrina tan grande como la que se manifiesta hoy?. Algunos opinan que el precio es lo único importante, aludiendo a la expresión “entre más barato mejor”, otros hablan de las “tres b” (bueno, bonito y barato), entre otras expresiones populares, que han cobrado especial relevancia hoy, cuando los bolsillos chilenos andan con el estanque a medias. Pero existen maneras más allá de vender casi a precio costo, que pueden definir estrategias a seguir cuando se trata de “conquistar” clientes.

Como primer elemento, tenemos el enganche por medio de incentivos, que es muy utilizado por grandes cadenas comerciales y se basa en una política que dice algo así “Por la compra de …, llévese gratis este práctico …”, o “Si paga con nuestra tarjeta, cuadruplique sus puntos …”. Éste tipo de estrategia tiene la desventaja de fallar cuando el estímulo desaparece, lo que hace casi un círculo vicioso el hecho de adjuntar, por una “módica suma”, otro artículo.

Como segundo elemento, está el de la espada o la pared, donde el cliente debe continuar la relación con el negocio porque el costo de cambiar es demasiado elevado. Aquí la empresa se ha inmiscuido a tal punto en el quehacer del cliente, que el desligue puede producir daños emocionales, operacionales o financieros. Por ejemplo, el litro de aceite está doscientos pesos más barato en un negocio del Fundo del Carmen en comparación al almacén de la esquina donde usted vive, pero se ve obligado a comprar aceite en dicho almacén ya que el “costo financiero” de ir a comprarlo al Fundo del Carmen es incosteable para usted debido al valor de la locomoción.

Por último, pero no menos importante, está el mantener una buena relación con el cliente. En éste caso, el consumidor o usuario preferirá sostener la relación con un determinado negocio debido a un vínculo afectivo con el mismo. Ésta estrategia es una de las que más cuesta ya que se debe al cultivo de la misma, y se pierde con mucha facilidad. Pero sin duda, tener al cliente contento y satisfecho es algo que como futuros kinesiólogos debemos tener muy en cuenta, ya que nuestro desempeño profesional tendrá mucho que ver con las recomendaciones que hagan nuestros clientes de nosotros, y para qué andamos con cosas, nadie recomienda un lugar incómodo o poco acogedor para sanarse.

jueves, 14 de agosto de 2008

Así se saluda en Nueva Zelanda


Vital herramienta para iniciar una buena relación con alguien, incluyendo un potencial cliente, es saber saludar. Por su puesto que no en todas partes se saluda de igual manera. Por ello les presento un caso singular, que tiene su orígen en Aotearoa (Nueva Zelanda en idioma maori).


Este país de algo más de 4 millones de habitantes, es un conjunto de tres islas ubicadas en medio del océano pacífico, 2.000 kilómetros al sureste de Australia.
Los maories son los indígenas que en primera instancia habitaron las islas, llenándolas no solo de gente, sino también de cultura, la que es muy vigente aún hoy en día, al rededor de 1000 años después de su llegada a la tierra de los kiwis.


Sin duda, uno de los aspectos más interesantes de ver en esa cultura es el llamado HONGI. Es un tipo de saludo, equivalente a un beso en la mejilla en el caso de la mayor parte de los países de América Latina.


El hongi en sí mismo, es el acto de unir la frente y las narices entre dos personas, lo que simboliza el compartir la respiración. Ésta característica es la que hace al hongi algo muy especial de recibir, ya que es un saludo entre maories practicado por siglos en su cultura, y cuando es compartido con extranjeros, debe recibirse como un honor, ya que debido a la gran cantidad de trabajo disponible en la cuna de los ALL BLACKS, muchos afuerinos han hechado raíces allí, y eso ha hecho de los maories un pueblo algo celoso de sus prácticas ancestrales, pero si se sabe llegar a ellos con respeto, entregan a cambio un recibimiento muy acogedor.

MUTU (FIN)

miércoles, 13 de agosto de 2008

Cliente V/S Producto

¿Qué es más importante?, ¿tener algo qué vender, o alguien que pague por ello?

Sin duda que los conceptos de cliente y producto son complemento, uno sostiene al otro. Pero, ¿cuál determina el rumbo a seguir cuando se trata de mantener a una empresa en el camino al éxito?, la respuesta es EL CLIENTE.

El arte de aprender a leer al cliente como si se tratase de un interesante libro abierto, es algo fundamental a la hora de emprender un proyecto empresarial. Es él o ella quien nos dirá qué servicio o producto generar para ofrecer, ya que de no dar en el gusto a las necesidades de los potenciales consumidores, de poco y nada valdrá nuestro esfuerzo y creatividad para concebir una venta.

En éste blog, se comentará todo aquello que tenga correlación con la mantención de buenas y eficientes relaciones con los clientes, ya que ellos representan la pieza central del puzzle, sin ellos armar el resto con éxito, es una misión imposible.


"Los clientes son un mundo de posibilidades para generar utilidades"